¿Te imaginas un cojín de aire que se auto regula en función de tu peso y nivel de inmersión deseado?. O un respaldo rígido que además de permitir configuraciones de posición muy exactas, puedas también regular su dureza con una válvula de aire. Son algunas de las novedades que nos trae la marca Varilite con su gama de cojines y respaldos, que gracias a Batec Orto Distribución podemos encontrar en cualquier ortopedia del territorio nacional.
Gracias a su válvula patentada PSV, los cojines tienen tres memorias predefinidas mediante las cuales el usuario puede configurar su cojín al nivel óptimo de presión según su peso. Una funcionalidad muy interesante que demandan muchos usuarios de cojines de aire, el poder establecer el nivel de presión óptimo de una manera sencilla por el propio usuario en cualquier momento.
Hemos contado con varias unidades para poder testear bien su funcionalidad y lo cierto es que nos han sorprendido mucho. En el apartado de cojines hemos podido probar el Zoid, un cojín de perfil bajo especialmente indicado para usuarios activos. También hemos probado el Evolution, para aquellos usuarios con alto riesgo de sufrir escaras. Ambos en su versión con válvula inteligente PSV que nos ha demostrado funcionar realmente bien.
También hemos podido probar toda la gama de respaldos rígidos Varilite Icon, en tres medidas de altura dependiendo de las necesidades de cada usuario. Unos respaldos con un alto grado de confort y posibles regulaciones. Os mostraremos la gama de respaldos en un próximo reportaje, pero en esta ocasión nos centraremos en los cojines Zoid y Evolution de Varilite.
Os contamos todas nuestras impresiones a continuación.
Empezamos con el cojín Zoid. Estamos ante un cojín especialmente indicado para usuarios activos. Un cojín sencillo y muy ligero pero sin embargo con unas características muy interesantes. Se trata de un cojín de perfil bajo que tiene 6 cm de grosor.
Lo que hace especial al Varilite Zoid es su mecanismo basado en flotación de aire y foam. El cojín está fabricado con tres densidades distintas de foam. Un foam blando para la zona más sensible donde se produce más apoyo, un foam medio para la zona de soporte y un foam duro para todo el perímetro. Este foam flota sobre una cámara de aire que es controlado por una válvula. De este modo se consigue que el foam se adapte a las formas del cuerpo del usuario y su peso se distribuya por el cojín.
Sin duda una de las cosas más innovadoras es su válvula PSV inteligente. Se trata de una válvula que tiene tres posiciones que se van alcanzando según vamos abriendo la válvula. Estas posiciones indicarán el nivel de inmersión que queremos alcanzar con el cojín. Los cojines se suministran con 3 memorias predefinidas que son válidas para casi todos los usuarios. Si se desea, el valor de estas memorias puede ser modificado en un establecimiento autorizado con la ayuda de un terapeuta. Una pequeña ventana en la propia válvula nos indica la posición de cada memoria.
El funcionamiento es sumamente sencillo y está pensado para que lo realice el propio usuario. Para empezar nos encontramos que el cojín posee un mecanismo de auto inflado. Con solo abrir la válvula al máximo, el cojín empieza a coger aire por si solo (lógicamente sin estar sentados en él). Una vez lleno de aire, cerraremos la válvula y nos sentaremos en él. Estando sentados abriremos la válvula hasta la memoria deseada. Para la mayoría de los casos se nos recomienda utilizar la posición 2. El cojín comenzará a soltar aire y la válvula automáticamente deja de soltar aire cuando se alcanza el nivel óptimo de inmersión en función del peso del usuario. Nos parece una fórmula magnífica para poder regular el cojín de manera exacta y sencilla en cualquier momento. Son muchos los usuarios que se quejan de la dificultad de configurar la presión correcta en sus cojines de aire y con este Zoid tenemos resuelto este problema de una manera ejemplar.
Hemos pesado la unidad de prueba, y en un tamaño de 43×43 cm nos ha pesado 752 gramos. Estamos ante un peso bastante ligero y es muy cómodo de manejar.
La parte inferior del cojín tiene una cinta para poder coger cómodamente el cojín. También cuenta con dos tiras de velcro para que podamos fijar el cojín al asiento de nuestra silla. Se suministran unas pegatinas de velcro para que las podamos fijar en el asiento..
Como se puede apreciar en las fotografías, el cojín está compuesto por una funda y el propio cojín. Un dato destacable es que los cojines Varilite se suministran con una funda adicional lo cual nos parece todo un detalle.
La funda del cojín tiene una calidad de acabados bastante elevada. No se ven costuras y tiene un tacto muy agradable. En el interior tiene una capa de foam perforado que favorece la circulación de aire y mejora la distribución de presión. Por supuesto la funda es lavable a máquina. Gracias a que se nos suministran dos fundas, se nos facilita seguir usando el cojín aunque tengamos que lavar una de ellas.
El propio cojín de foam y aire por su parte también está envuelto en una funda que es resistente al agua y pinchazos.
Hemos pasado bastantes horas sentados en el Varilite Zoid y tenemos que decir que nos ha gustado muchísimo. La mezcla de foam y aire ofrece un confort y una estabilidad muy buenos. Estamos ante un cojín que nos ha resultado muy cómodo. El sistema de válvula PSV funciona muy bien y según lo vamos regulando notamos como nos vamos sumergiendo en el cojín hasta llegar a la presión correcta. Entre las posiciones 1 y 2 no hemos notado tanta diferencia como con la posición 3 donde alcanzamos una inmersión bastante elevada. El fabricante como apuntábamos recomienda usar la posición de memoria 2.
Otra de las cosas que nos ha gustado muchísimo es que con esta tecnología, a pesar de utilizar aire, tenemos una mayor estabilidad que en cojines completamente de aire. Cualquier usuario de cojines de aire sabe que cuando nos apoyamos en él para realizar una transferencia, el aire se transfiere a la parte que no tiene apoyo. En los Varilite, gracias a esa mezcla de aire y foam que le da consistencia, no notamos tanto esta transferencia de aire y tenemos mucha más estabilidad a la hora de realizar la transferencia. Esta consistencia también ayuda a que sea imposible que se nos arrugue el cojín en una transferencia. Sin duda es algo muy a tener en cuenta que ofrece un plus de confort en el uso diario, especialmente a aquellos usuarios activos que realizan muchas transferencias a lo largo del día.
También hemos contado con el cojín Varilite Evolution PSV. Se trata de un cojín con la misma tecnología que el Zoid pero indicado para usuarios con mayor riesgo a sufrir úlceras por presión o necesidades de posicionamiento simétrico.
Estamos ante un cojín de perfil alto de casi 10 cm de altura. Utiliza también la válvula inteligente PSV con la que podemos inflar de aire el cojín automáticamente para posteriormente sentarnos y elegir una de las tres memorias predefinidas para conseguir el nivel de inmersión óptimo.
A diferencia del Zoid, en el Evolution nos encontramos con unas formas más marcadas para ayudar en el posicionamiento de las personas que lo necesiten. Esto se consigue con combinaciones de dureza del foam utilizado junto con la flotación de aire.
El modelo probado del Evolution, en una medida de 43×43 cm nos ha dado un peso de 872 gramos. Se trata de nuevo de un peso muy bajo para un cojín de perfil alto con todas estas funcionalidades.
Todas las ventajas que comentábamos que tenía el Zoid por usar esa mezcla de tecnología de distintas densidades de foam unido a la flotación de aire y válvula inteligente PSV las encontramos en el Evolution.
Para terminar, os mostramos un interesante vídeo de Varilite donde se explica muy bien cómo funciona su tecnología
Por último señalar que tanto el cojín el Varilite Zoid como el Evolution tienen un precio recomendado de 534€ más IVA. Son distribuidos en España por Batec Orto Distribución y por lo tanto se pueden encontrar en cualquier ortopedia especializada.