Bestic es uno de esos productos que cuando lo descubres te das cuenta de las ayudas y posibilidades que el mundo de la robótica puede ofrecer a las personas con movilidad reducida. Se trata de un aparato que ofrece asistencia en una tarea tan básica como es comer. Algo que para muchas personas resulta imposible realizar sin ayuda de una tercera persona, con Bestic podrán comer de manera autónoma.
Llama la atención el diseño y reducidas dimensiones del Bestic. Se nota que estamos ante un producto diseñado desde el punto de vista de la propia persona que lo necesita. Su tamaño y forma nos permite usarlo en cualquier lugar e incluso trasportarlo de manera sencilla. Su aspecto y formas se integra perfectamente con el resto de mobiliario de cocina, sin llamar la atención. Además, su control puede ser ajustado a cada persona mediante distintos tipos de botones, joystick o incluso manejo con los pies dependiendo de las necesidades.
De origen sueco, el Bestic nació en el 2004 cuando Sten Hemmingsson experimentó en primera persona las dificultades que tenía para poder comer de manera autónoma debido a su discapacidad. Sten no quería depender de su mujer para que le diera de comer y durante varios años fue desarrollando un producto que le solucionara sus necesidades. Su objetivo era construir algo con lo que una persona con las mínimas capacidades físicas en manos y brazos pudiera comer por si mismo. En 2011 fue cuando el Bestic salió a la venta y se ha afianzado como un producto líder en su campo.
Se trata de un producto muy silencioso, como movimientos suaves y muy fácil de usar. Pero sobre todo nos llama la atención lo bien que resuelve el ir vaciando el plato de comida que se le pone delante para llevarnos cada cucharada a la boca. Algoritmos muy trabajados que van recorriendo el plato de manera muy eficiente. El Bestic como decíamos es muy fácil de usar y lo más importante, controlado en todo momento por la persona que lo está usando.
Su peso es de tan solo 2,3 Kg lo que hace que podamos llevarlo fácilmente a cualquier parte.
Desde su lanzamiento, el Bestic se ha ido mejorando y evolucionando. Prueba de ello es que han conseguido hacerlo accesible a un mayor número de personas gracias al control mediante la pulsación de un único botón. Tan sencillo como pulsar unicamente una vez un botón para que nos coja la comida con la cuchara y nos la acerque a la boca.
También podemos manejarlo mediante dos pulsaciones de ese mismo botón para tener más control, mediante joystick o mediante un mando usb de 5 botones donde aquellos usuarios que puedan tendrán un control más fino de los movimientos del robot.
Sea como sea el manejo, el software tiene programados distintos algoritmos para dejar el plato vacío poco a poco de la manera más eficiente posible.
Cuenta con varias memorias por si lo quieren compartir distintos usuarios. O incluso en caso de ser de uso personal podemos tener distintos perfiles como por ejemplo desayuno, comida y cena.
Sin duda un producto sumamente interesante que viene a solucionar una tarea básica de la vida cotidiana de cualquier persona, de forma que pueda realizarla de manera autónoma. Más información en BESTIC